Sin duda, la protección de datos empresariales no es una opción, sino una necesidad vital. El reciente robo masivo de datos al Banco Santander o los mayores ciberataques de la historia, como los de Yahoo, Facebook, Microsoft y otros, demuestran cómo el robo de información es cada vez más sofisticado y con un costo astronómico para las empresas. Pero esto no es todo. El potencial de sanciones legales, el daño reputacional y la pérdida de datos críticos de la empresa son otras de las graves consecuencias.
Según las estimaciones de la industria, el cibercrimen podría costar al mundo 10.5 billones de dólares anuales en 2025. Ante una constante y creciente amenaza, ¿te has preguntado qué tan protegida se encuentra tu empresa y qué medidas deberías tomar para mejorar su seguridad? En este artículo te lo contamos. Más vale prevenir que curar.
La protección de datos se refiere a las medidas y prácticas implementadas para asegurar que la información sensible y personal de una empresa esté protegida contra accesos no autorizados, uso indebido, pérdida o robo de datos corporativos. Este concepto abarca los datos de los clientes y los datos internos de la empresa, como información financiera, estratégica y de recursos humanos. Específicamente, la seguridad de los datos de un negocio implica la ejecución de políticas de seguridad, el uso de tecnologías y otras herramientas de seguridad informática, así como la capacitación del personal para reconocer y responder adecuadamente a las amenazas de seguridad.
Explora este tutorial sobre la protección de datos.
De acuerdo al Instituto Nacional de Ciberseguridad, la seguridad de la información cuenta con 3 pilares sobre los que se aplican “medidas preventivas y reactivas” para salvaguardar la información. Estos son:
Si bien es primordial implementar un sistema de monitoreo continuo y de detección de amenazas, existen otras medidas de protección de datos que deben considerarse:
¿Qué pasa si no tienes protección de datos? Las empresas pueden enfrentarse a una serie de riesgos y graves consecuencias. Cada filtración de datos conlleva un costo promedio aproximado de 4.45 millones de dólares. Además, el tiempo de inactividad de TI es extremadamente alto, con un valor aproximado de 5.600 dólares por minuto.
Otros riesgos y consecuencias negativas incluyen:
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